Dice Séneca: “¡Que haya alguna diferencia entre tú y un libro! ¿Hasta cuándo aprenderás? Enseña ya también”. “Zenón dijo esto, Cleantes lo otro.” ¿Por qué escuchar de ti lo que puedo leer?” Y digo yo que dice Pedro, que dice Ramón y que dice Rodolfo que bla, bla, bla…
Lo que entiendo que dice Séneca es que debo dejar de repetir como un loro y de citar a unos y otros, y empezar a buscar lo que sé y cómo lo puedo compartir. En otras palabras, me invita a generar valor agregado (hacerme cargo de lo que digo) y no competir con Google por las citas y las referencias bibliográficas.

Muy en sintonía, me susurra Epicteto al oído: “¿Cuánto tiempo más vas a esperar antes de demandar lo mejor de ti mismo?” Pues bien, no esperaré más y manos a la obra. “Visualiza con claridad, actúa con determinación y resiste con disciplina”, dice Marco Vázquez (fitness.revolucionario) en su libro, que ya es mi libro INVICTO (2021).
Visualizar con claridad en este caso sería conectar con el discurso propio, agregar valor, aportar mi grano de arena.
Actuar sería poner en práctica mi propio entendimiento de cada una de las enseñanzas estoicas y su relación con el emprendimiento, y en cuanto a resistir, intuyo que en este caso es:
Resistir mis ganas de esconderme detrás de otros autores. Resistir mis deseos de hacer otras cosas y no invertir en un blog mi ya muy poca “seriedad profesional”. Resistir a la voz de mi ego que me invita a no exponerme a las críticas que mis acciones e interpretaciones pudieran generar.
Voy a resistir entonces y sacaré en cada post lo mejor que pueda encontrar dentro de mi.
De la práctica de la “percepción, de la acción y del control”, o cómo salir de la modorra.
Dice Marcos Vázquez (Invicto 2021) que “no hay metodologías concretas para organizar todos los conceptos estoicos y aplicarlos en nuestro proceso de cambio”, pero aun así podemos seguir las 3 grandes prácticas propuestas por Epicteto, que organiza la filosofía estoica en la práctica de la percepción, de la acción y del control.
Por otro lado, el libro “Estoicismo Cotidiano” de Holiday y Hanselman está organizado con la misma lógica, pero se las llama las disciplinas de la “percepción, la de la acción y la del control”.
En el artículo ¿Necesitan los emprendedores del estoicismo? vimos una caracterización de los emprendedores y un tímido acercamiento a la filosofía que nos convoca, ahora bien, me propuse organizar las características emprendedoras dentro de cada una de las prácticas propuestas por Epicteto, y la cuestión quedó más o menos así:
Aquí tienes una organización de las características de los emprendedores dentro del marco de la práctica estoica propuesta por Epicteto:
Práctica de la percepción: Pasión y perseverancia, Flexibilidad y adaptabilidad.
Práctica de la acción: Creatividad e innovación, Mentalidad empresarial.
Práctica del control: Autonomía y autodisciplina
Antes de profundizar en cada una de ellas, me gustaría compartirte que si bien nos sirve usar la organización de las tres prácticas o disciplinas propuestas por Epicteto, no me quedo solo con sus ideas, sino que voy tomando todo aquello que considero que puede aportar al “mindset emprendedor”. En otras palabras, iremos “peinando” lo escrito por las grandes mentes del estoicismo temprano, medio y tardío, pero también por autores contemporáneos que realizan grandes esfuerzos por actualizar esta filosofía a los tiempos “modernos”. Algunos de ellos son Ryan Holiday, Massimo Pigliucci, Pierre Hadot, y quiero destacar a dos españoles que hacen enormes esfuerzos por “bajar al llano” los conceptos estoicos: Pepe García (@elestoico) y sí, sí, sí, otra vez: Marcos Vázquez (@fitnessrevolucionario). Llegaremos también a otros genios filósofos y claro, no puede faltar Nassim Taleb, quien nos dijo: lo impensado está a la vuelta de la esquina (El Cisne Negro) y se tuvo que inventar la palabra ANTIFRAGILIDAD (que se refiere a la capacidad de un sistema o entidad para prosperar, mejorar y fortalecerse cuando se enfrenta a la volatilidad, el desorden y el caos), porque con resiliencia no le alcanzaba.
Dice Séneca, sobre la Brevedad de la vida, 14.i: “Son hombres ociosos solo quienes están libres para la sabiduría, solo ellos están vivos, pues no conservan solo su vida: cualquier tiempo lo añaden al suyo; todos los años que se han desarrollado antes que ellos, están adquiridos para ellos. Si no somos de lo más desagradecido, reconoceremos que los esclarecidos fundadores de venerables doctrinas nacieron para nosotros, organizaron su vida para nosotros”.
Digo yo: todos ellos han trabajado para nosotros y sería una total falta de respeto y pérdida de tiempo no usarlos como lo que son: un gran regalo para nuestro propio crecimiento personal.
Ahora bien, volviendo a las tres prácticas o disciplinas,
La disciplina de la percepción se enfoca en: “cómo vemos y percibimos el mundo que nos rodea”.
La disciplina de la acción se enfoca en “las decisiones y acciones que tomamos y con qué fin”.
La disciplina de la voluntad se refiere a cómo hacer frente a las cosas que no podemos cambiar, cómo desarrollar una opinión clara y conveniente, y cómo entender realmente nuestro lugar en el mundo.
La práctica de la percepción abarca la pasión y perseverancia, ya que es fundamental para mantener el enfoque y la motivación en el emprendimiento. También incluye la flexibilidad y adaptabilidad, ya que los emprendedores deben ser capaces de ajustarse y superar los desafíos y cambios en su entorno.
La práctica de la acción se relaciona con la creatividad e innovación, ya que los emprendedores deben ser capaces de generar ideas nuevas y encontrar soluciones originales a los problemas. También abarca la mentalidad empresarial, que implica tener una visión estratégica, tomar decisiones calculadas y asumir riesgos calculados.
La práctica del control se refiere a la autonomía y autodisciplina, ya que los emprendedores deben ser capaces de tomar el control de sus acciones y seguir adelante con determinación y disciplina. También implica mantener el control emocional y mental, ya que los altibajos y las dificultades son parte del camino emprendedor.
En conclusión, el estoicismo ofrece un marco filosófico valioso para los emprendedores, ayudándoles a desarrollar cualidades esenciales como la pasión, la creatividad y la autodisciplina en un mundo lleno de desafíos. Al abrazar las prácticas estoicas de la percepción, la acción y el control, los emprendedores pueden encontrar orientación y fortaleza para enfrentar las incertidumbres y triunfar en sus esfuerzos. Al final del día, el estoicismo nos recuerda que somos responsables de nuestras acciones y que podemos aprender y crecer a partir de cada experiencia. Como emprendedor, es fundamental no solo buscar el éxito material, sino también el crecimiento personal y el impacto positivo en el mundo que nos rodea. Entonces, ¿necesitan los emprendedores del estoicismo? La respuesta está en su capacidad de aplicar estas enseñanzas a su vida y su trabajo, transformándose en líderes resilientes y sabios en su viaje emprendedor.
Nos leemos…